La solubilidad de las sustancias por lo general aumenta al elevarse la temperatura y su representación gráfica se realiza mediante las curvas de solubilidad.
Consecuencia:
Si se enfría una solución saturada, la solubilidad disminuye y el exceso de soluto cristaliza. En tanto, que la solubilidad de los gases en líquido varia en forma inversa con la temperatura y de forma directa con la presión.
Ejemplo: bebidas carbonatadas, donde el CO2 se absorbe a temperaturas bajas, y que a temperatura ambiente hay desprendimiento de burbujas.